Una de las plagas que más nos encontramos habitualmente en nuestras ciudades tiene que ver con las ratas y es que estas cuentan con una gran habilidad para introducirse en nuestros hogares y empresas y hacerse con el control de ellas. Por ello, a lo largo de las siguientes líneas os queremos mostrar cuales son las ratas más comunes a las que nos enfrentamos habitualmente, así como que debemos de hacer para evitar que nos acompañen en nuestro día a día.
Para ello, lo primero y más importante pasa por saber cuáles son y, en este aspecto, en nuestro país los tipos más comunes de roedores y que son motivo de preocupación e infecciones, son los siguientes:
- Rata negra o Rattus rattus: también conocidas como rata de los tejados, suelen anidar en árboles, bodegas y graneros. Su cola es más larga que su cuerpo y miden de 16 a 24 cm de longitud. Además, sus características son hocico puntiagudo, orejas grandes y cuerpo pequeño. En el caso concreto de estos animales, su periodo de gestación es de 3 semanas y pueden tener de 5 a 10 crías y de 3 a 6 camadas por año. Pero no solo eso, sino que este tipo de rata suele darse principalmente en los puertos y su agilidad les permite escalar paredes, mientras se alimentan de frutas frescas o alimentos con alto contenido de agua.
- Rata gris o Rattus norvegicus: este tipo de rata habita en zonas urbanas, ya que prefieren permanecer en la tierra. Su lugar favorito son las alcantarillas y es desde ahí donde se introducen a las empresas y casas. Miden hasta 40 cm de longitud, aunque en este caso su cola es más corta que la cabeza y cuerpo y su hocico es chato, con orejas pequeñas y un cuerpo más grande a diferencia de la rata negra. Por lo que respecta a las cifras, el número de camadas que pueden tener al año son de 3 a 6, con 7 a 8 crías y tardan 12 semanas para alcanzar la madurez. También acostumbran a hacer madrigueras y su alimento favorito son los cereales.
- Ratón doméstico o Mus musculus/domesticus: estos son los más activos y existe una gran probabilidad de que puedan introducirse en domicilios o negocios en cualquier momento. Miden aproximadamente de 7 a 9.5 cm de longitud y su cola es del mismo tamaño que su cuerpo. Los rasgos que las distinguen de la rata común son sus ojos y orejas grandes, patas y cabeza pequeñas. Además, tienen de 7 a 8 camadas por año, con 4 a 16 crías en cada una y cuentan con una gran facilidad para hacer nidos en diversos materiales. En lo que respecta a la comida, estos se alimentan de cereales y pueden sobrevivir sin agua adicional.
Pero ahora que los conocemos mejor, ¿cómo podemos saber si hay ratas en nuestra casa? Lo cierto es que en ocasiones no es tan sencillo detectar si habitan dentro de casas o empresas, puesto que te recordamos que estos animales acostumbran habitar en sótanos y madrigueras, ya que suelen buscar zonas con buena temperatura y de acceso fácil a la comida. No obstante, si escuchas ruidos en el interior de las paredes, suelos o techos durante la noche y encuentras pequeños excrementos, cartón o envases de alimentos agujereados, piensa que estas son evidencias definitivas de que estás conviviendo con ratas.
Por todo ello, para proteger tu casa, empresa, negocio u oficina de estos roedores, los consejos más habituales que podemos seguir y que ayudarán a evitar que esto pueda suceder son:
- Mantener todas las áreas en condiciones de limpieza óptimas.
- Evitar tirar comida a través del baño o fregadero, los roedores podrían acceder a ellos por medio de las tuberías.
- Mantener los contenedores y bolsas de basura siempre cerradas.
- Verificar que no existan grietas o agujeros en las paredes, en el caso de encontrar alguno, cerrarlo de inmediato.
- Cerrar correctamente ventanas y puertas.
¿Cómo podemos acabar con las ratas?
Lo primero que debemos de tener claro es contra quien nos enfrentamos y en este sentido cabe recordar que las ratas y ratones son animales muy listos y sabemos que su presencia no es nada agradable. Por ello, encontrarse con uno de ellos puede ser una señal de alarma, ya que pueden invadir en poco tiempo toda la casa o negocio, además de los destrozos que pueden llegar a causar. Pero este no es el único problema ya que las ratas y ratones son portadores de parásitos, bacterias, virus y, por si fuera poco, ácaros, piojos, pulgas y nematodos. Así, las enfermedades que nos pueden transmitir son salmonelosis, leptospirosis, rabia, tularemia, listeriosis y toxoplasmosis.
Por ello, para deshacerse de estos animales, lo más recomendable es ponerse en contacto inmediatamente con Fumicon, dejando el problema en manos de expertos. Si bien, os recordamos que, para combatir este tipo de animales, mínimo necesitaremos de dos visitas, una para eliminar las existentes y la segunda para controlar las restantes.