Siempre se ha indicado que la relación entre los niños y niñas pequeñas y los animales ha sido realmente interesante. Por un lado, a los niños y niñas les da ternura un animal con el que tengan contacto a diario, como puede ser el caso de los perros o los gatos. Por el otro, los animales saben que esas personitas que tienen delante son más vulnerables que el resto, por lo que suelen tener especial cuidado con ellos y ellas. Está claro que hay una gran relación entre los dos tipos de seres y no cabe la menor duda de que es una relación que podríamos considerar como beneficiosa para las dos partes, especialmente para esas personitas pequeñas que se están formando.
Uno de los animales que más suele captar la atención de los pequeños es el caballo. Se trata, sin lugar a dudas, de uno de los animales más nobles de todos cuantos existen y la verdad es que no nos extraña en absoluto que, por tanto, tengan la capacidad de llamar la atención de los más pequeños. Se trata de un animal que destaca por su respeto por el ser humano y que, al mismo tiempo, invoca el mismo respeto por parte de quienes le conocen. Quien está acostumbrado al trato con caballos sabe perfectamente de lo que estamos hablando y de los beneficios que eso tiene para el ser humano.
En una información publicada en la página web De mi casa al mundo se hacía especial hincapié en la necesidad de que los niños aprendan a montar a caballo y que tengan la capacidad de aprender a mantener una relación con un animal. Se asegura en dicho artículo que esta es una de las mejores maneras de potenciar todo lo que tiene que ver con la responsabilidad animal, lo cual es indispensable en un mundo como en el que nos movemos, en el cual se tiene en cuenta más que nunca el trato que reciben los animales.
El portal web del diario Clarín también hace referencia a que existe un afecto entre el niño y el caballo. Y es que los dos se respetan al máximo precisamente por lo que estábamos comentando más arriba, por el simple hecho de que el animal sabe que se encuentra ante una persona vulnerable y porque el niño también es consciente de la ternura que despierta en él el animal. Ni que decir tiene que hay que promover en todo lo posible relaciones como de las que venimos hablando.
Además, huelga decir que, si un niño aprende a montar a caballo, empezará a sentirse responsable. Sabe que el animal depende de él, que necesita establecer un control sobre el caballo para que haga exactamente lo que él quiere. La necesidad de despertar ese sentido de la responsabilidad en los niños es una de las cuestiones más interesantes que lleva años planteando la comunidad educativa y, desde luego, puede ser de especial utilidad a la hora de conseguir avances sociales a largo plazo.
La relación entre peques y caballos solo proporciona beneficios al conjunto de la sociedad. Y de eso se vienen dando cuenta los profesionales de la educación. Ese es el motivo principal por el cual, según los trabajadores y trabajadoras de Caballos Pre Mendoza, se están incentivando en los centros educativos las excursiones y viajes a centros en los cuales se pueden visitar a los caballos. Para muchos niños, es la primera experiencia con animales de este tipo y huelga decir que puede ser el primer paso para cultivar un gran interés en el mundo animal, lo cual puede repercutir positivamente en la personalidad de los niños y niñas.
Un animal que causa sensación
Normalmente, un niño nunca recuerda cuál fue la primera vez que vio a un perro o a un gato, pero sí que puede tener en mente cuándo estuvo en contacto con un caballo por primera vez. Y es que ese tipo de experiencias no se suele olvidar. Estamos hablando de uno de los animales de referencia en todos los sentidos y, desde luego, es lógico que genere una impresión superior que cualquier otro. Eso no va a cambiar ni mucho menos.
Estamos convencidos de que va a seguir habiendo un gran interés por el caballo en la sociedad española. No cabe duda de que acercar este animal a los niños va a seguir reportando beneficios y que hay que promover ese contacto de todas las maneras posibles. Ahora que se están recuperando las excursiones escolares tras los peores momentos de la pandemia, nos parece ideal que se tenga en cuenta un aspecto como este. Y lo cierto es que nos están haciendo caso. Sin duda, es una buena noticia que tenemos que seguir estirando en el tiempo.