Cómo lograr que nuestro hijo no tenga miedo al dentista.

El miedo al dentista parece ser algo común en niños y adultos por igual desde hace muchísimos años ¡y no es de extrañar! Un dolor de muelas puede llegar a ser algo muy doloroso, y por desgracia antiguamente una persona podía incluso morirse de ello. Además, los dentistas no disponían de los avances tecnológicos ni científicos de los que disponemos en la actualidad, y las técnicas eran mucho más invasivas e incómodas.

A pesar de que hoy en día las visitas al dentista suelen ser consistir en una experiencia bastante rápida, eficaz e indolora, esta creencia y fobia que se ha desarrollado a lo largo de los años sigue calando en muchos de nosotros. Tanto ocurre, que hasta un niño que nunca ha ido al dentista puede sentir una fobia absoluta al pensar en ir a uno ¡imagínate!

Las sillas, los aparatos, las jeringas, el olor o el simple hecho de que alguien nos esté toqueteando en la boca no nos convence a muchos adultos ni a niños. La única diferencia, es que de adultos podemos mantener mejor las maneras, y de niños no. Por ello, en este artículo vamos a darte una serie de pautas que pueden ayudarte a convencer a tu hijo de que pierda el miedo al dentista y lograr que se tranquilice para su próxima revisión.

¡No te lo pierdas!

Tu hijo sentirá una mayor confianza con estos consejos.

Puede parecer imposible que nuestro hijo deje de temblar al imaginarse entrando en el dentista; lo peor, es que la mayoría de nosotros acabamos empatizando con nuestro pequeño y sintiendo lástima por él, llevándonos incluso en algunos casos a evitar estas visitas por ahorrarle un mal trago al pequeño ¡Craso error! Pues le estaremos causando un mal mayor si no cuidamos su salud dental a tiempo.

Podemos evitar estas consultas al dentista intentando que nuestro hijo lleve una buena higiene dental impecable todo lo que podamos…Pero si por lo que sea, le sale una caries (un problema bastante común) nuestro hijo lo pasará bastante mal y tendremos que visitar uno inexorablemente. ¿No es mejor llevarle a revisión, aunque éste no tenga nada grave? Siempre podrá descansar tranquilo y saber que está manteniendo una buena higiene dental.

Además, si no supera estos miedos de pequeño se enfrentará a ellos de mayor con una peor sensación de temor. Por ello, te recomendamos seguir las siguientes pautas:

  1. Comienza temprano.

Como bien saben los expertos de la Clínica Dental Víctor del Canto, es fundamental que los niños se familiaricen con la experiencia dental desde una edad temprana.

Por ello, te recomendamos llevar a tu hijo al dentista incluso cuando cumpla los 3 años, para que se acostumbre al entorno y al personal. Esto ayudará a normalizar las visitas al dentista y reducirá la ansiedad asociada con lo desconocido.

  1. Crea un ambiente positivo durante sus visitas.

Selecciona un dentista que tenga experiencia en el trato con niños y que cree un ambiente acogedor y amigable. La decoración de la consulta, los juguetes en la sala de espera y el personal amable pueden ayudar a que tu hijo se sienta más cómodo y relajado durante la visita.

  1. Juega al dentista con tu hijo.

Antes de la cita, juega con tu hijo al «dentista» en casa. Permítele examinar tus dientes con un espejo y un cepillo de dientes de juguete. Este juego puede ayudarle a perder el miedo al dentista, ya que tu hijo se sentirá familiarizado con los instrumentos y procedimientos dentales de manera divertida.

  1. Sé honesto y positivo.

Háblale a tu hijo sobre la importancia de cuidar los dientes y explícale qué ocurre durante una visita al dentista de una manera honesta y tranquilizadora. Evita usar palabras como «dolor» o «inyección»; en su lugar, enfatiza que el dentista ayuda a mantener los dientes fuertes y saludables.

  1. Premia el buen comportamiento.

Recompensa a tu hijo por su valentía y buen comportamiento durante la visita al dentista.

Para hacerlo, puedes hacer algo tan simple como elogiarlo, darle una pegatina o un pequeño regalo. Estas recompensas refuerzan una asociación positiva con la atención dental y motivarán a tu hijo a comportarse bien durante sus visitas al dentista.

  1. Controla tu propio lenguaje corporal.

Los niños se dan cuenta de todo y pueden detectar la ansiedad de los adultos con gran facilidad. Por ello, te aconsejamos que mantengas la calma y seas optimista durante su visita al dentista, ya que tu actitud puede influir en sus sentimientos y emociones.

  1. Programa citas con frecuencia.

Programa visitas frecuentes al dentista para que la atención dental se convierta en una rutina normal y no en un evento traumático. Además, la prevención y el mantenimiento son aspectos clave que nos ayudarán a evitar problemas dentales graves en un futuro.

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