Cuando efectuamos una compra por internet se pone en marcha un dispositivo de transporte y almacenamiento que opera sin cesar las 24 horas hasta que el paquete llega a nuestra casa. En ocasiones, el artículo comprado, aunque se haya fabricado en otro país, proviene de un almacén a pocos kilómetros de nuestra dirección. Otras veces, debe recorrer miles de kilómetros en pocos días para que lo tengamos en nuestras manos. Analizamos el transporte y logística de tres conocidas empresas para comprender el proceso.
Para transportar una prenda de ropa desde su punto de fabricación hasta nuestro hogar suelen intervenir varios medios de transporte que se van combinando en las distintas fases del proceso. Se emplea el transporte marítimo para envíos intercontinentales grandes cantidades; Se usa el transporte aéreo para los envíos más urgentes, y se emplea el transporte por carretera para llevar la prenda a los puntos de logística y para que llegue al destino final.
Los operadores de Transportes Internacionales, una empresa de Madrid que gestiona envíos de mercancías a todo el mundo, comentan que tan importante como el transporte es la logística. Es decir, el almacenamiento provisional de mercancías en almacenes para su posterior distribución o embarque en otro medio de transporte. De esta forma se consiguen que los envíos sean más rápidos y menos costosos.
Veamos esta cuestión en concreto.
Shein, el gigante asiático de la moda low-cost por internet.
La empresa china Shein, con menos de 15 años de existencia, se ha convertido en una de las principales tiendas de venta de ropa online en todo el planeta, incluido EEUU y Europa. Todas sus prendas de ropa se fabrican en China y se venden en los hogares de medio mundo.
Fieles al espíritu industrial del país asiático, su interés es fabricar y vender ropa en grandes cantidades, haciéndolo a precios reducidos, para que todo el mundo tenga acceso a ella. Cada día cuelgan en su web, nuevos diseños dirigidos a personas con distintos gustos y de todas las tallas.
Para que nos hagamos una idea, Shein vende por internet 4 veces más ropa que Zara, y lo hace a mitad de precio. A veces uno piensa, que con los precios que presentan, es imposible que el negocio pueda llegar a ser rentable.
La primera clave es que Shein no tiene tiendas. Solo vende por internet. Sabemos que dispone de un gran almacén de 10.000 metros cuadrados en el interior de China. Pero aun así, si tuviera que enviar cada prenda de ropa que vende por correo desde China hasta la casa de cada cliente, tampoco saldrían las cuentas.
Shein trabaja con almacenes propios y externos. Respecto a los propios, es muy celosa de la ubicación de sus instalaciones. Afirma que en España cuenta con uno, pero no sabemos dónde está. Lo que sí sabemos es que posee un almacén de 40.000 metros cuadrados en Polonia, desde el que se organiza toda la distribución a Europa y Oriente Medio, otro en Los Ángeles (California), que se encarga de abastecer el mercado norteamericano, incluido Canadá y México, y un almacén más pequeño en Dublín, que surte a las islas británicas.
Respecto a la logística externa, lo que hace es alquilar parte de las instalaciones de las empresas de transporte con las que trabaja. En el caso de España: Correos, Zeleris, GLS y CTT Exprés.
Otra de las cuestiones es que Shein delega el empaquetado en otras empresas. Utiliza un embalaje sencillo, suficiente como para que la ropa pueda ser transportada sin recibir grandes daños. En España se apoya en Correos, mientras en Estados Unidos usa los paquetes de la empresa de transporte Colis Expart y en México los de paqueterías como Estafeta y Red Pack.
Para compras realizadas en España, la empresa asume los gastos de envíos siempre que el ticket supere los 29 €. En ese caso, da un plazo de entrega similar al que establece el servicio postal, que oscila entre una semana y quince días.
Si la prenda debe ser trasladada desde otro centro logístico, incluido China, la página web aumenta el plazo de entrega. Shein hace un estudio detallado de sus ventas. Enviando las prendas de ropa en grandes cantidades a los almacenes que abastecen los mercados en los que más se venden. Lo hace por continentes y por países.
Los envíos voluminosos los efectúa por transporte marítimo y la redistribución por diferentes almacenes se realiza por carretera. De esta forma puede hacer ventas a bajo precio, entregadas en pocos días.
Amazon, el gran Marketplace del mundo.
Primero hay que dejar claro que Amazon no es un vendedor, es una plataforma de venta. La multinacional norteamericana cede su infraestructura digital a los vendedores y se encarga de la distribución. Lógicamente, por este servicio cobra un porcentaje sobre las ventas.
La empresa comenzó vendiendo libros casi en los albores de internet. Gracias al éxito que obtuvo, diversificó su oferta a otros nichos. Hoy en día, desde su web se venden casi todos los tipos de productos físicos que existen, y por supuesto, ropa.
Amazon indica en su página web para comerciantes, que cualquier vendedor puede contratar sus servicios logísticos abonando una cuota de 39,99 € al mes, más el porcentaje correspondiente sobre las ventas. Es un precio irrisorio si lo comparamos con que cuesta el alquiler de una tienda física. Amazon te asegura un tráfico constante de usuarios interesados que va a ver tus productos. En España, 16 millones de personas buscan a diario la web de Amazon por Google, y en Estados Unidos 124 millones.
Además, Amazon emplea el marketing digital, enseñando tus productos a personas que han buscado un artículo similar y ofreciéndolos en ventas cruzadas para ampliar el ticket de venta.
Una vez inscrito en el programa, el vendedor debe configurar la logística de Amazon, es decir, en qué plazo quiere entregar sus productos al comprador. Debe hacer un listado de productos, introduciendo en su panel las fotografías de sus artículos uno a uno junto con una descripción. Seguidamente, deberá empaquetar los artículos individualmente, siguiendo las indicaciones que le da Amazon. Deberá poner las etiquetas que la compañía le indique y por último, llevar su mercancía al centro logístico acordado.
En España, Amazon dispone de 29 almacenes o centros logísticos repartidos por todo el territorio nacional. En función de su demanda y del acuerdo que el vendedor ha suscrito con Amazon, los artículos se van redistribuyendo entre varios almacenes. De esta forma se pueden realizar entregas casi instantáneas, las llamadas Amazon Prime, que llegan a casa, como máximo, dos días después de la compra.
Una vez el fabricante o distribuidor del producto se ha suscrito a la plataforma, será Amazon la que se encargue de gestionar la venta y distribución de los productos, así como de asumir las devoluciones. El vendedor solo debe estar pendiente de mantener su stock y de cobrar sus beneficios cuando Amazon se lo permita. Generalmente, 60 días después de la venta y siempre que se supere un mínimo de 100 €.
Inditex, la logística para una gran empresa de moda.
Como sabes, Inditex es la propietaria de las marcas Zara, Stradivarius, Berskha, Pull & Bear, Uterque y Máximo Dutti. Se trata de una de las principales empresas del mundo en el sector de la moda rápida o Fast Fashion. La venta de ropa al gran público, a precios accesibles para que los usuarios puedan mantener actualizados sus armarios y vestir siempre a la última.
El año pasado, según señala el periódico La Información, Inditex obtuvo los mejores resultados de su historia. Eso se debió, entre otras cosas, al aumento de las ventas online. La empresa facturó por internet 7.800 millones de euros, lo que equivale casi a la cuarta parte de la facturación total.
Esto ha llevado a la multinacional española a reinvertir este año un total de 1600 millones de euros en nuestro país, centrándose principalmente en la mejora de sus centros logísticos.
Dijo Óscar García Maceiras, consejero delegado de la empresa, en una rueda de prensa celebrada en Arteixo (A Coruña) donde presentó los resultados anuales de Inditex, que «uno puede tener la mejor propuesta de moda, pero siendo una multinacional, si esa propuesta no está en condiciones de llevarla a donde los clientes quieren, no seremos capaces de ejecutar nuestro modelo»
Por eso, uno de los principales objetivos de Inditex es ampliar y mejorar sus almacenes para adecuarlos a las ventas online, no solo para abastecer a su red de tiendas, con la intención de ahorrar costes y aumentar beneficios.
En la actualidad, Inditex dispone de 4 grandes centros de distribución desde los que suministra las ventas online. Uno central en Arteixo (Galicia), otro en Zaragoza, otro en Tordera (Barcelona, encargado de los productos Berskha) y otro en Sallent de Llobregat (Barcelona, exclusivo de la marca Stradivarius). A eso hay que añadir un gran centro logístico en Lelystad (Holanda), desde el que se cubre todo el comercio con el centro de Europa.
Para hacer llegar la ropa que compramos por internet a nuestra casa, tan importante es la logística como el medio de transporte que se utilice en los envíos.