Cualquier tipo de consultorio medico o relacionado con la salud, en el que se practiquen determinadas acciones, que impliquen algún tipo de instrumental que entre en contacto directo con el paciente, debe cumplir unos exigentes protocolos de limpieza, higiene y esterilización de los componentes. Del mismo modo que un quirófano debe ser aséptico en la mayor medida posible, un consultorio dental, debe estar exento de cualquier tipo de agente infeccioso.
Nuestros amigos de ZM Clínica de odontología avanzada, recomiendan que a la hora de elegir un consultorio dental, este cumpla con todos los protocolos de esterilización pertinentes. Durante años, las clínicas dentales fueron causa de numerosos contagios de hepatitis entre algunos de sus pacientes. De ahí, la importancia de saber elegir bien el tipo de clínica al que acudimos. Asegurarnos de que el material reutilizable es esterilizado y las consultas también, es fundamental para evitar problemas posteriores.
Las clínicas, sean de la índole que sean, son susceptibles, debido a los procesos que realizan de suponer un riesgo de infección relacionado con la asistencia sanitaria. Por esta razón, hay que incorporar procedimientos y recomendaciones encaminados a la prevención y disminución del riesgo.
El área de exploración y/o tratamiento de las clínicas, debe disponer en las instalaciones de los dispositivos y elementos adecuados para garantizar la asepsia. Empezando por la higiene de las manos que son las encargadas de llevar a cabo las diferentes y pertinentes exploraciones. En las unidades o servicios que lo requieran, se aplican normas de asepsia y antisepsia; en áreas determinadas se desarrollan y aplican las medidas preventivas y el control de las infecciones correspondientes.
Durante los procesos odontológicos se generan aerosoles que a su vez se diseminan por el ambiente. En el se suspenden bacterias patógenas creando un alto riesgo de infección. Deben por lo tanto utilizarse barreras de protección personal y ambientales, así como mantener un flujo adecuado en las áreas de trabajo clínico y el manejo correspondiente de los desechos generados durante la consulta y exploración o tratamiento. Este procedimiento, debe incluir tanto medidas de asepsia y antisepsia como el correcto manejo del material estéril, su limpieza, desinfección y esterilización.
Por lo general, en las clínicas dentales, se utiliza material sanitario o instrumental no desechable. Esta es la razón por la que las mismas, deben contar con un espacio diferenciado para el área de esterilización. Esta área, debe comprender la clasificación correspondiente de los instrumentos que componen la sala.
Clasificación del instrumental y su esterilización
Dentro de la clínica odontológica, existen los siguientes elementos clasificados para su correcto uso y desinfección:
- Instrumental crítico. Este grupo corresponde a instrumentos quirúrgicos cortopunzantes o que penetran en los tejidos de la cavidad oral. Instrumental de cirugía o endodoncia, por ejemplo, deben ser esterilizados tras cada uso.
- Instrumental semicrítico. En este grupo se encuentran instrumentos que no penetran en las mucosas, pero pueden estar en contacto con ellas o expuestas a los diferentes fluidos. Instrumental para la ortodoncia o las prótesis deben esterilizarse tras su uso.
- Instrumental no crítico. A este grupo, corresponden instrumentos o dispositivos que pueden estar en contacto frecuente con los aerosoles generados durante el tratamiento. Botones del sillón dental, mangos o lámparas, requieren entre paciente y paciente una desinfección practicada con agua y detergente.
Las clínicas odontológicas, deben disponer de un protocolo de limpieza, desinfección y esterilización del material reutilizable. Este protocolo, debe garantizar un triple sistema de validación a través de controles físicos, químicos y biológicos. Dentro del protocolo debe incluirse la organización de la actividad, la metodología, los productos utilizados, la lista de elementos a esterilizar, la periodicidad, el sistema de registros, las responsabilidades del personal, indicaciones y las actuaciones. Este protocolo debe validarlo la dirección del centro.
Para la correcta desinfección y esterilización del instrumental crítico deben seguirse los siguientes pasos tras su utilización. Colocar en una cuba de ultrasonidos o bajo chorro de agua para eliminar fluidos por arrastre. Al finalizar la jornada, trasladar el material sucio cerrado con tapa, al área de esterilización donde se procede al lavado manual o automático antes de proceder a la esterilización en la autoclave. Proteger puntas y filos con siliconas o gasas para evitar perforaciones es fundamental en el proceso de esterilización.
Enjuagar, secar, inspeccionar, empaquetar, sellar y esterilizar, son los pasos a seguir para mantener el protocolo del instrumental crítico.
En el caso del instrumental semicrítico, se sigue generalmente el mismo proceso que antes. Algunos componentes del instrumental como la pieza de mano, la turbina, el contra ángulo y el micromotor, deben ser desinfectados y esterilizados en autoclave tras cada uso, y al finalizar la jornada, debe aplicarse un lubricante especifico para el mismo. Tras un uso en cirugía, deben esterilizarse en las condiciones que marque el propio fabricante.
Para el material o instrumental no critico como los sillones, los equipos de rayos X, ordenadores, sillas, etc. es recomendable una desinfección con espray o toallitas desinfectantes entre pacientes.
La escupidera debe rociarse con espray desinfectante y dejar correr el agua para eliminar fluidos y restos. El acople de la aspiración debe dejarse funcionando aspirando una solución desinfectante con agua, según recomiende el fabricante.
Procedimiento de desinfección
En lo referente al lavado manual del instrumental, el personal destinado a la tarea, debe utilizar en todo momento, guantes gruesos de goma, delantal de plástico y protección facial y ocular. Esto es indispensable para la prevención de exposiciones a fluidos corporales que pueden generar infección. Debe manipularse con especial precaución el material cortopunzante para evitar exposiciones ante un corte.
No debe someterse a lavado por ultrasonido el material plástico o de goma, espejos, óptica y motores ya que se deterioran. Materiales cromados o plateados sueltan su cubierta en estos procesos, por lo que tampoco se pueden someter a ellos.
El lavado por ultrasonidos se recomienda para el instrumental de diseño intrincado, ese al que es difícil acceder a todas sus superficies y aquellos que no pueden desarmarse como las pinzas de biopsia. En estos instrumentos, puede acumularse sangre que no es posible eliminar con una limpieza manual.
La solución de detergente a utilizar para limpiar el material, debe prepararse con agua tibia y deberá cambiarse cuando la carga de suciedad sea excesiva o teniendo en cuenta las especificaciones del fabricante.
Una vez preparada la solución, hay que colocar el instrumental en el depósito de lavado, asegurándose de que todo quede sumergido, desarmado y abierto.
Cepillar el instrumental bajo el agua para evitar salpicaduras y aerosoles. Utilizar un cepillo suave y escobillas. No utilizar elementos abrasivos que puedan dañar el instrumental y aumentar la corrosión del mismo. El instrumental fino y afilado debe lavarse por separado. También hay que separar el instrumental que este fabricado en materiales diferentes. Enjuagar con abundante agua destilada si es posible.
Secar todo el instrumental con un paño adecuado que no desprenda ningún tipo de fibra o pelusa o son aire a presión.
Inspeccionar y comprobar cada uno de los instrumentos, en función de su utilizad y objetivo. En el caso de deterioro, deben sustituirse.
Una vez llevados a cabo todos estos pasos y el examen exhaustivo de cada uno de los instrumentos, se colocan en bolsas que se sellan para proceder a su esterilización en autoclave. Las bandejas no deben llenarse demasiado ya que las bolsas se inflarán durante el proceso y requieren un espacio extra para que la esterilización sea correcta.
Este es un protocolo de desinfección y esterilización para una clínica odontológica. Si la clínica de tu elección, cumple con el mismo, puedes acudir con total tranquilidad, ya que el seguimiento de estos protocolos reduce casi absolutamente, el riesgo de contagio o infección.