Nuestro país, España, es uno de los destinos preferidos por todos los turistas del planeta, es por ello por lo que cada año debemos de aumentar nuestras capacidades receptoras para poder satisfacer todas aquellas necesidades que nos plantean, tanto los visitantes foráneos, como los locales. Que nuestro país sea uno de los destinos predilectos no es casualidad y es que, a lo largo y ancho de nuestro territorio, todo aquel que lo desee, puede gozar de nuestra gastronomía, la cultura, la belleza de nuestros enclaves, el clima y, sobre todo, de la hospitalidad que le ofreceremos tan pronto como lleguen a su destino.
Hoy en día existen muchos tipos de turismo diferentes, desde el de toda la vida de mochila y aventura, hasta el más lujoso y exclusivo, pasando, como es lógico, por el destino vacacional en familia, así como por el realizado en pareja o sin compañía. En la publicación de hoy nos centraremos en el más exclusivo, un tipo de turismo en auge que está consiguiendo que nos reinventemos y que podamos ofrecer al visitante todo aquello que sueña y espera tener para hacer de su estancia, uno de los momentos más especiales de su vida.
El lujo es algo que casi siempre asociamos con belleza, con la virtud de poder disponer de todo aquello que es exclusivo y que está al alcance de muy pocos. Por suerte, nuestro país dispone de los medios y de los enclaves perfectos para que esto se cumpla y, así, conseguir que el número de visitantes de clase alta, aumente año tras año. La Costa Blanca, en Alicante, es uno de estos parajes de los que os hablamos y es que su belleza es tal, que incluso un evento de carácter global como lo es La Vuelta ciclista a España, saldrá en su edición de 2019 de uno de los municipios que componen este lugar.
Pero no solo la belleza de este lugar atrae a los visitantes y es que, aunque sus calas y sus playas, unidas al clima, ya son de por sí una buena razón de peso para pararse a disfrutar de la zona, lo cierto es que existen otros muchos atractivos que hacen de ella, de la Costa Blanca, un lugar irrepetible.
En lo que a gastronomía se refiere, aquí se asienta la cuna española del turrón que comemos en navidad, concretamente en la localidad de Jijona, pero no solo eso, sino que también podemos disfrutar de Bocopa, una de las bodegas con más renombre de la zona y la cual, además de ofrecernos sus grandiosos caldos, también nos propone una jornada de enoturismo, un buen plan para disfrutar en pareja o con los amigos y que tiene, como su propio nombre indica, al vino como centro de atención, por lo que a lo largo del día, además de visitar la bodega y degustar los diferentes vinos, también podremos conocer la zona a través de sus viñedos y de las espectaculares vistas del lugar.
Y si os gusta el tema de las visitas únicas con guía y catas ¿qué os parecería probar el oro líquido español y aprender sus beneficios? En Jaén, tierra de olivos, encontraremos el Centro de Interpretación Olivar y Aceite, donde podremos disfrutar de una experiencia de oleoturismo en Úbeda maravillosa.
Pero más allá del vino o el aceite, en nuestra ruta de lujo por España y, más concretamente por la Costa Blanca, también podemos hacer un alto en el camino para hacer senderismo o coger la bicicleta, tal y como harán los integrantes del pelotón de La Vuelta y rodar o andar por las montañas, las calas y la costa de Alicante, un lugar en el que podremos desconectar y llenarnos de paz, mientras disfrutamos de los que más nos gusta, la relajación de estar de vacaciones, sin nadie que nos marque los tiempos ni nos estrese ya que, para eso, ya nos llega con nuestro trabajo del día a día.
La Costa del Azahar, otro de los enclaves de lujo
Unos kilómetros más arriba por la costa mediterránea, nos encontraremos la Costa del Azahar, otro de esos parajes que nos hará sentirnos como reyes al amparo de sus preciosas poblaciones, sus aguas tranquilas y a buena temperatura y su gastronomía mediterránea. De esta zona, Peñíscola es, quizá, la población más conocida y es que su playa norte, con más de 4 kilómetros de largo y su paseo marítimo hacen de este, un gran lugar para descansar, sin embargo, la realidad es que no es lo único que podemos hacer aquí, ya que la población nos ofrece el castillo del Papa Luna para conocer su historia y entender un poco mejor el pasado de la zona.