A pesar de lo limpio que tengas tu hogar, es inevitable que los muebles y otros textiles necesiten de una buena limpieza cada cierto tiempo. Ya se trate de una limpieza puntual como de una limpieza debido al derrame de algún líquido. Sea cual sea el motivo hay que saber que productos usar ya que según el material de fabricación habrá productos que no se podrán aplicar sobre estos.
En este post te vamos a presentar una lista de consejos para que sepas cómo limpiar los textiles de tu casa y que no sufran lo más mínimo.
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Utiliza agua fría
Lo más recomendable a la hora de lavar los textiles de casa es usar agua fría, poniendo un centrifugado corto y dejándolo secar al aire libre, olvidando por completo la secadora. El motivo por el que se debe usar agua fría no es más que, por que así evitarás que las prendas como las sábanas de algodón encojan y garantizarás que los colores perduren en el tiempo.
Si por el contrario de trata de artículos más pequeños, como una funda de almohada o de cojín, no será necesario poner una lavadora expresamente para ello. Usa un barreño y llénalo de agua fría con un cacito de detergente líquido y lávalo a mano. Luego déjalo secar al aire libre también.
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Suavizantes y perfumadores de ropa
A todos nos gusta meternos en la cama y que las sabanas estén perfumadas y huelan bien. Para ello hay que saber elegir un detergente de calidad. Hay algunos detergentes que vienen con el suavizante incorporado o suavizantes individuales, tanto líquidos como en perlas o spray, entre otras opciones.
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¿Problemas para eliminar manchas?
Si se trata de artículos oscuros o de un color intenso, evita la lejía radicalmente por que los puede deteriorar. Para eliminar las manchas en estos casos hay distintos productos que si se aplican de forma adecuada antes de introducir las prendas en la lavadora, estas se eliminaran más fácilmente.
También un producto muy recomendado para eliminar textiles son los desincrustantes recuperadores de ropa. “Este producto en polvo recuperador permite eliminar manchas difíciles resistentes al cloro, como manchas amarillas de cremas, bronceadores y filtros solares”, explican desde Meprolim, empresa de productos y maquinaria de limpieza profesional en Canarias.
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Limpia en seco
La gran mayoría de textiles de cama no necesitan de una limpieza en seco, ya que están fabricados y preparados para una limpieza y uso habitual. Esto tiene una pequeña excepción y es que el relleno de los nórdicos de plumas no lo debes lavar en tu lavadora, debes llevarlo a un profesional.
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Separa la ropa
Para que todo el textil tenga una vida útil más duradera la recomendación es lavar las prendas por separado, es decir, pon lavadoras con prendas y artículos blancos y otra con las prendas de color. O una lavadora con prendas delicadas y otra con prendas de una calidad más mala.
No es necesario prestar mucha atención a las prendas delicadas, pero sí que es importante no cargar mucho el tambor de la lavadora, ya que puede que la ropa no se lave bien y se deteriore más rápidamente.
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Deja secar al aire libre
Si tienes la posibilidad de secar la ropa al aire libre, está va a ser sin duda alguna, la mejor opción, ya que no vas a tener que recurrir al planchado posteriormente y ahorrarás mucho más tiempo. Por lo que si tienes tiempo y la posibilidad de tener la ropa de forma tradicional, hazlo, sobre todo con las prendas grandes, como colchas, fundas nórdicas, sábanas…
En el caso de que tengas que hacer uso de la secadora, lo mejor es que no la cargues en exceso. Lava los artículos más grandes de forma individual y así quedarán menos apelmazados y se secarán antes, haciendo que sufran menos por el calor de la secadora.
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¿Hay que planchar siempre?
Como hemos comentado en apartados anteriores, si el textil se seca al aire libre, te puedes quitar la idea de planchar de la cabeza pero como con todo, existen algunas excepciones y resulta que las prendas de algodón percal, si que necesitan de un planchado posterior al secado para que su presencia sea la deseada.
Recuerda estos consejos básicos: antes de lavar o secar un artículo, lee la etiqueta de cada prenda o artículo, para no exceder la temperatura recomendada. Lavar a una temperatura superior a la recomendaba lleva a la prenda a perder calidad y perder el color. Mete las telas lisas y del mismo color en el mismo lavado, el blanco todo junto y el oscuro por otro lado.