La meditación está de moda, pues como nos aseguran los expertos en este campo de inspirare.es, la vida moderna precisa de las técnicas de meditación y muchas personas se han dado cuenta de lo útiles que pueden ser. Vamos a ver cómo se puede aprender en tan solo 7 pasos a meditar.
Elección de la técnica
Cuando se habla de “meditación” es cierto que pueden englobarse multitud de técnicas, algunas con más historia que otras. La principal clave para tener éxito es ser constante. Piensa que es mejor meditar 15 minutos diarios que darse atracones de tres horas una vez a la semana.
Encontrar un sitio y tiempo para practicar
Es necesario contar con un sitio tranquilo en el que no nos molesten y una hora diaria donde podamos añadir con facilidad dicha sesión de meditación.
Adopción de posturas confortables
Sin duda, una de las bases de una buena meditación es contar con una postura erguida y confortable. El objetivo es sumergirse en la práctica, por lo que hay que despreocuparse del cuerpo. Hay que olvidarse de cruzar las piernas o de hacer gestos que sean exóticos con nuestras manos. Es necesario estirar.
Relajación
La postura es importante, pero la relajación física es un cemento que la sostiene. No se puede meditar teniendo el cuerpo con tensión, porque en lugar de estar enfocados nos distraeremos con dicha incomodidad. Hay que invertir también una serie de minutos en relajarse antes de comenzar a meditar.
Meditar
En este punto solo se debe ir siguiendo las instrucciones de los audios, pero también existen una serie de consejos que pueden ser útiles para una mayor fluidez. Se mejora de forma importante con la atención y la manera en que se trata cuando hay dificultades. En el caso de que nos sintamos agobiados o mareados, es necesaria una respiración profunda, abriendo despacio los ojos y comenzar a moverse de forma lenta. Como principal objetivo se mejora la atención y la forma en que se tratan las dificultades. No hay que pasarlo mal, es ir entrenando la mente.
Algo que se recomienda es permanecer inmóviles mientras se medita. Pese a que al principio puede parecer poco cómodo, lo cierto es que a largo plazo es de gran ayuda para poder concentrarse.
Es necesario ir soltando las expectativas que podemos tener sobre una buena o una mala meditación. Sepamos que cada una de las sesiones va a ser única, aunque lo que es más importante es hacerla diariamente y lo mejor que podamos.
Integración en nuestra vida de la meditación
Uno de los secretos para ir progresando es que se integre en nuestra vida. En el caso de que estemos desarrollando la atención plena al presente, se puede integrar manteniendo ese mismo estado cuando se hacen una serie de actividades como pueden ser hacer una serie de actividades como la práctica del deporte, hablar con nuestras amistades, pasear al perro, trabajar, etc. Así es como el entrenar y los beneficios pueden disfrutarse durante todo el día.
Profundizar
Conforme pasa el tiempo no solo se pueden llegar a sentir las ventajas de la meditación, también es cierto que pueden ir apareciendo dudas. Mucha gente no sabe de qué forma se pueden superar los obstáculos de la práctica. De igual forma también hay dudas sobre lo que se debe hacer con las experiencias que nos desconciertan.
En este momento es cuando se debe profundizar. Buena parte de las ciudades tienen centros para el yoga, el budismo o para meditar, pero hay que tener cuidado a la hora de comprometerse. Para ello hay que asegurarse de que el maestro que esté a cargo tenga confianza, porque hablamos de un sector donde no todo es trigo limpio, aunque los genuinos suelen ser extraordinarios.
Hay una serie de criterios para poder examinar a los maestros de la meditación, los cuales son la titulación o los años de experiencia, así como las opiniones y experiencias que pueden tener otros estudiantes, contar con el respaldo de una tradición importante o que el estilo de vida vaya a concordar con la que está enseñando.
Deseamos que este artículo os haya servido para saber cómo se puede aprender a meditar, algo que siempre es interesante y que conviene valorar en su justa medida. Si te pareció interesante, no dudes en compartir este artículo con tus familiares, compañeros o amigos, pues la meditación merece la pena expandirla, pues los beneficios son importantes y cuanta más gente lo disfrute mejor. Nuestros mejores deseos en este sentido ¡A meditar se ha dicho!
